La estructura de la familia efímera y saludable es buena para el crecimiento de los niños, pero si esta llega a sufrir alteraciones inesperadas, puede llegar a afectar en la vida de los niños, especialmente cuando son jóvenes. A veces, los padres no se dan cuenta de los efectos que tienen sus acciones sobre sus hijos, pero sus decisiones pueden incluso arruinar la vida y la personalidad de sus hijos a largo plazo. Muchas de estas malas decisiones engloban a la infidelidad.
La infidelidad en una relación puedes destruir la estabilidad de los hijos
Los niños tienden a culparse cuando la estructura de la familia de va destrozando. Esto se debe a que carecen de madurez emocional y no pueden separarse de sus padres, trayendo como consecuencia que cualquier error cometido por alguna de las partes, ellos lo consideren como si fueran suyos. Si tu hijo sigue absorbiendo toda esa culpa a medida que crece, sentirá que el cariño de familia es algo que nunca existió ni existirá.
Serán adultos infieles
Los hijos tienden a seguir los pasos de sus padres, es por ello que desde que nacen tratan de imitarlos en todo e incluso llegan a repetir sus malas decisiones. Esto sucede porque los niños ven a su padre o madre como “héroe”, un modelo a seguir que toman inconscientemente. Por consiguiente, pensarán que todo lo que hace su padre es correcto y crecen sintiendo que la infidelidad es un comportamiento aceptable.
Temor a ser abandonados
Un niño crece teniendo una perspectiva sobre la familia, si llega a haber algún inconveniente, como la infidelidad de alguno de sus padres, el niño sentirá que su padre o madre ha traicionado a toda la familia. Experimentando de esta forma lo que es el abandono de un ser querido y ello hará que crezcan con el temor a que suceda lo mismo en sus relaciones más serias. E incluso, este temor puede llevarlo a no establecer ninguna relación futura, para no volver a ser lastimado.
Enfrentado por la traición

Betrayal and treachery concept. Silhouette of a sad man with a knives in back and reflected in water
A los niños no les afecta algún inconveniente o traición por parte de los amigos o compañeros de clase debido a que con ellos no tiene un vínculo especial como el que comparte con la familia, por lo que es muy poco probable que sean lastimados. En cambio, si la traición es entre sus padres, puede afectarle profundamente. Esto sucede porque sienten que el vínculo especial que tenían ha sido roto, aumentando con ello sus temores.
Con ello comenzarán a cuestionarse muchas cosas y no conseguirán la tranquilidad familiar que alguna vez tuvieron. La peor traición que se puede sufrir a temprana edad.
Problemas de confianza
Los niños que han sufrido por la separación de sus padres debido a una infidelidad, pueden desarrollar problemas de confianza permanentes en su vida adulta. Creen que debido a que uno de sus padres fue engañado, también ellos sufrirán por ese mal trago. Lo que tendrá como resultado que le sea muy difícil confiar en sus parejas, y se vuelvan personas muy posesivas con las personas que si lograron pasar sus defensas e inseguridades.
Be the first to comment